Soy yo,
Presa de todo lo que tu nombre toca.
Quien se exilia al más recóndito lamento.
Quién te imprimió en su pupila
Como una maldición.
Soy Yo,
Quien se convierte en tu lineal desvarío.
Quién húmeda suda tras tus llagas.
Quien soslaya tu recuerdo borracho
Tu onírica aparición.
Soy Yo,
Quien te arropa en blanco y negro
Quien quiebra tu pálido reflejo
Quien lanza estás letras al vacío
Solo…
para que alcancen a tocarte,
Solo…
para que no te vayas...